El Señor nos da advertencia siempre que vamos a tomar una mala decisión o vamos a cometer un error.
Por eso Él siempre quiere que cuando vayamos a escoger algo o decidir en alguna cosa, comentemos con nuestros padres amigos y hermanos para ver si está bien o es correcto o no deberíamos hacer lo que tenemos en mente.
Ami también me pasa, por ejemplo:
Quiero hacer pulseras y tengo que quemar las puntas de las cuerdas para que no se deshile, y en vez de pedir a un adulto ayuda o preguntarle si lo puedo hacer sola, voy y lo hago sola sin comentar.
Pues luego pasa lo que pasa, que me quemo el dedo.
Por eso el Señor nos da padres, amigos, hermanos...
Para confiar en ellos y que nos guíen hacia el amor de Dios.
Y con la ayuda de Él podemos seguir adelante nuestros sueños :)
Que bonita y práctica forma de recordarnos que debemos confiar en los nuestros que Dios por algo nos dió a nuestros padres , hermanos. Los amigos depende no todos son lo que parecen y más aún si no creen en Dios. Me gusta tu ilustración. :)
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